El día en el que los más improbables entre los exploradores encuentran prodigios de la naturaleza tales como una galleta caliente en el Polo Norte; un piano perfectamente conservado en una gruta de Perú; o una vela que quema debajo del mar; equipos de expertos llegan a conclusiones absurdas. Nadie se las cree y menos que nadie Recoleta, una niña muy lista que leerá todos los libros escritos hasta dar con la solución. Un álbum que se lee como una novela policíaca y que nos recuerda que el motor de la imaginación, la creatividad y la innovación se encuentra en las palabras de la literatura que nos abren mundos.